Teddy Eddie 5 Blog_ES 5 Una buena academia de idiomas, ¿cómo es? ¿Cómo elegir una buena academia para los niños?
Una buena academia de idiomas, ¿cómo es? ¿Cómo elegir una buena academia para los niños?

Ago 27, 2023 | Blog_ES

Cuando empieza un nuevo curso escolar, pensamos mucho en cómo organizar muy bien la agenda de extraescolares para los peques, y no es nada fácil. ¿Ajedrez o fútbol? ¿Natación o tenis? ¿Las clases de música serán compatibles con las de robótica? Una de las decisiones más importantes es la de elegir una academia de idiomas, porque eso lo sabemos todos: hay que aprender idiomas. ¿Pero cómo debería ser una buena academia de idiomas? ¿En qué tenemos que fijarnos a la hora de elegir?

  • idea y visión

Lo primero es el programa que se ofrece. Aunque parezca obvio, al principio merece la pena preguntar por los métodos de enseñanza que hay en la academia. ¿Cómo es su filosofía de enseñar idiomas? ¿Qué es lo más importante para ellos? ¿Qué efectos esperan conseguir? ¿Trabajan con algún método conocido y reconocido, como p.ej. Teddy Eddie o Savvy Ed? Podemos esperar buenos resultados sólo si el material está organizado de manera lógica. 

Una certificación o franquicia, además de aportar contenidos de calidad, garantiza a los clientes ciertos estándares, como por ejemplo un límite de alumnos por grupo. Es más, los profesores que trabajan con un método certificado son controlados por los expertos en metodología y cada profesor, por muy bueno y cualificado que sea, de vez en cuando deberá someter su trabajo a evaluación y comprobación. Por lo tanto, no tengamos miedo y preguntemos en la academia qué sistema de atención y revisión metodológico tienen para sus empleados. Si no recibimos una respuesta clara, deberíamos tener mucho cuidado.

  • ¿quién enseñará a nuestros peques?

Tampoco debemos tener miedo de preguntar sobre el profesor y sus cualificaciones, teniendo en cuenta que cuanto más joven o inexperto sea, más importante es que tenga a alguien que lo guíe por el camino correcto (es otra ventaja de la certificación, porque en los cursos tan elaborados los profesores suelen contar con un gran apoyo). Un profesor joven no tiene que ser una mala apuesta, justo lo contrario: muy a menudo los profesores sin experiencia tienen la energía y entusiasmo tan necesarios a la hora de enseñar a los más pequeños. Lo importante es que sepan a quién acudir si tienen algún problema y que puedan contar con alguien de la academia que los apoye.

Las buenas academias de idiomas invierten tiempo y dinero en el desarrollo de su personal. Echa un vistazo a las paredes. ¿Se ven diplomas de conferencias o seminarios? ¿Hay certificados de talleres? ¿Existe una jerarquía de profesores (por ejemplo, becario, especialista, experto)? Si la academia ofrece posibilidades de desarrollo profesional y de ampliación de conocimientos, va a atraer a los mejores profesores. También hay que mirar las relaciones entre el profesorado en los descansos: un centro que cuenta con un equipo muy unido garantiza un intercambio de experiencias, consejos e ideas, y eso se refleja directamente en la mejor calidad de las clases.

  • algo más que enseñanza de idiomas

Un buen equipo es importante también para crear una comunidad en torno a la academia. ¿Es un lugar al que sólo se va a hacer los cursos de idiomas o también para quedar con amigos? ¿Hay eventos especiales para estudiantes o jornadas de puertas abiertas? La motivación es mucho más natural cuando uno percibe la academia de idiomas como un lugar de diversión, y no como un aula aburrida.

Ya que hablamos del aula, hay que fijarse en las condiciones en las que aprenden los niños. En un aula para los más pequeños sin duda tiene que haber espacio con alfombra para trabajar y moverse. No puede haber solamente pupitres y nada más. Tampoco puede ser un espacio sobrecargado con juguetes, cojines coloridos y un montón de gadgets: eso tiene buena pinta, pero al final son distracciones que no dejan a los niños prestarle atención al profesor. Es suficiente con una alfombra o moqueta en el suelo y colores no llamativos.

  • una perspectiva más amplia con un plan de cursos para más de un año

Volvamos otra vez al programa de enseñanza. Una buena academia de idiomas puede ofrecerle al alumno una perspectiva de enseñanza a largo plazo, para varios años en adelante. Cuando venimos a la academia con nuestro niño de edad preescolar, preguntemos qué plan tienen para su formación hasta que tenga un nivel avanzado del idioma. ¿En cuántos años podrá hacer exámenes? ¿Para qué exámenes pueden prepararlo? ¿Ofrecen al menos dos vías que se pueden elegir según las necesidades individuales de cada niño y su motivación para aprender idiomas?

Hay que destacar que un buen centro, por un bien mayor, sabe decir un “no” a sus clientes. Una buena academia de idiomas asigna a los alumnos en grupos de manera bien clara, no metiendo en un mismo saco a los niños que empiezan a aprender inglés en primaria con los que llevan haciendo cursos desde la etapa infantil. 

No se puede permitir que los padres exijan que sus dos hijos que tienen edades diferentes y están a niveles distintos del idioma vayan a las mismas clases: eso perjudicaría no sólo a los propios niños, sino también al grupo entero. En tal caso no nos pongamos nerviosos, intentemos entender que, si nos encontramos con una respuesta negativa del centro, no es porque no quieran ponérnoslo fácil, sino porque son profesionales y velan por nuestro bien y por mantener los estándares altos de enseñanza de idiomas.

Es cierto que elegir una academia de idiomas adecuada requiere dedicarle tiempo y hacer varias preguntas importantes. Debemos darle mucha importancia a esta tarea, pero merece la pena: pronto descubriremos que una buena academia y un buen curso garantizan que aprender idiomas sea puro placer. Además, una vez tomada la decisión, hará que estemos cubiertos durante muchos, ¡muchos años!

La autora de esta entrada, Sonja Górniak, cursó Estudios Ibéricos en la Universidad de Varsovia. Estudió en la Universidad de Cambridge donde aprobó el examen de Proficiency. Durante años se especializó en dar cursos tipo in-company. Hace ya varios años, por pura casualidad, empezó a enseñar a los niños y fue una experiencia preciosa. Ahora es experta en metodología Edu Bears y lleva unos años enseñando, supervisando e inspirando a los profesores a atender a las necesidades de sus alumnos.

Puedes leer más sobre el método Teddy Eddie aquí: https://teddyeddie.com/es/sobre-el-metodo/, y el centro acreditado del método Teddy Eddie más cercano a ti encontrarás en el mapa aquí: https://teddyeddie.com/es/ubicaciones/

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